Yo taché la poesía que escribiste
Te rayé los renglones
Te rasguñé los puños
Yo taché parte de tu estómago
Pero escribí lágrimas cuando te vi desencajada
Yo te desordené el abecedario
Y no encontramos más palabras
Yo te tenía miedo
Porque te vi escrita y pura
Yo solo soy un residuo de las decisiones nocturnas
Yo no llego a ser una sopa de letras
Ni por lo saludable
Ni por lo entera
Yo me caí en las hojas que escribías
Y te quemé las piernas mientras estabas comiendo
Yo no esperaba caerme de mi plato
Yo nunca robé destinos
Siempre fui la poesía tachada de la historia
Por eso sentí los derrapes en tu cara
En los temblores de mi pulso
Yo siempre estuve ahí
Pero nunca tan mujer, nunca
Pude escribir tu paz.
19/11/2010
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